Capítulo 576
Era media noche. Burgess ya había regresado a casa. Ethan y Olivia eran los únicos que quedaban en la villa.
“¿Estás cansado?”
Olivia negó con la cabeza y dijo: “En absoluto. Veré la televisión un rato”.
Se sintió un poco incómoda. Aunque los dos ya estaban casados, ella todavía no estaba tan familiarizada con Ethan.
Ella todavía se mostraba reacia a tener intimidad con él.
Ethan notó su inquietud. No estaba dispuesto a apresurar las cosas. “Está bien, miraré contigo”.
Olivia estaba viendo una telenovela mientras Ethan escribía en su computadora portátil a su lado.
Olivia lo miraba de vez en cuando. Llevaba gafas con montura dorada.
La luz del techo arrojaba un brillo cálido sobre él y lo hacía parecer más gentil.
Fue como si Ethan sintiera la mirada de Olivia. Levantó la cabeza.
Ethan vestía un pijama de seda negro. El pijama tenía una textura excelente y emitía un suave brillo bajo la luz, que contrastaba con el brillo dorado de sus gafas con montura dorada.
Ethan se ajustó suavemente las gafas con el dedo medio y miró a Olivia. Preguntó con voz profunda: “¿Qué pasa?”.
Olivia inexplicablemente comenzó a sonrojarse por el movimiento casual de Ethan. “N-Nada.”
Ethan dejó su computadora portátil y preguntó: “¿Tienes sed o hambre? No comiste mucho en la cena hace un momento. ¿Quieres cenar?
Los ojos de Olivia se abrieron cuando preguntó: “¿De verdad sabes cocinar?”
Olivia pensó que las palabras de Madame Burgess eran exageradas. Ella pensó que la otra dama simplemente estaba tratando intencionalmente de hacer que Ethan se viera bien.
Ethan se arremangó y le dio unas palmaditas en la cabeza a Olivia. “Espera aquí.”
Luego, entró a la cocina.
Pronto se escucharon ruidos de cocina provenientes de la cocina. Olivia había pensado que Ethan, en el mejor de los casos, le prepararía unos espaguetis.
Pero, al ver lo ocupado que estaba, empezó a pensar que podría estar preparando un banquete elegante.
El fuego de la estufa parpadeó y arrojó algunas sombras que bailaron sobre la figura alta y esbelta de Ethan.
Después de una hora, Olivia escuchó la voz de Ethan proveniente de la cocina.
“Puedes lavarte las manos y prepararte para comer”.
Después de lavarse las manos, Ethan ya había puesto la comida en la mesa.
Camarones a la Diabla, Ceviche y Aguachile.
Los ojos de Olivia se abrieron mientras miraba los platos de aspecto picante.
Pensó que un hombre elegante como Ethan le prepararía una comida elegante. Pero en cambio, todo era comida callejera normal.
Ethan sacó un pañuelo húmedo y se limpió los dedos. “No tuve tiempo suficiente para hacer algo demasiado sofisticado. Probar.”
Olivia dijo con voz apagada: “No esperaba que hicieras comida como esta”.
Ethan sonrió y dijo: “Solías molestarme por comida callejera y cerveza fría. No creo que esos camiones de comida fueran lo suficientemente higiénicos.
“Entonces aprendí a preparar la comida yo mismo. Al menos la comida está más limpia de esa manera”.
Olivia miró las manos de Ethan. Su piel estaba pálida, por lo que las ampollas del aceite caliente eran claramente visibles.
“¿Estás herido?”
“No es nada. ¿Quieres que te ayude a pelar los camarones?
Aunque solo estaba preguntando, Ethan ya se había puesto guantes desechables y había comenzado a pelar camarones para Olivia.
Olivia sentía que Ethan era muy atractivo cuando estaba concentrado, ya fuera trabajando o pelando camarones.
Olivia sintió calidez en su corazón.
Aunque no le quedaban muchos parientes, él era tan bueno con ella que pensó que podría ser alguien en quien pudiera confiar en el futuro.
