Capítulo 702
Jessica lloraba tanto que apenas podía recuperar el aliento. “Kenneth, pensé que el abuelo finalmente sentiría nuestra sinceridad mientras yo criara a Darrell y administrara bien la casa. Sin mencionar que tú y Janice ya os habíais divorciado. Aún así, nos toma como extraños después de todos estos años.
“Creo que deberíamos irnos. Aquí no hay lugar para nosotros”.
Aunque Janice no había dicho nada, Kenneth se enojó por la provocación de Jessica y ayudó a Darrell a levantarse, soltando: “¿Quién se va? ¡Ellos son los que deberían irse!
Sin embargo, Kenneth se arrepintió de sus palabras tan pronto como terminó de hablar.
Sabiendo qué clase de vida horrible había vivido Janice en el pasado, no tenía intención de expulsarla. Incluso aceptaría su petición si deseara pasar el resto de su vida en la residencia Miller.
Sin embargo, no se había dado cuenta de lo que estaba diciendo en el calor del momento.
Decir palabras hirientes era como clavar un cuchillo en el corazón de alguien. Y aunque la herida se volviera
en una cicatriz, todavía dolería.
Pero de todos modos, Kenneth estaba acostumbrado. Aunque sintió que se había metido el pie en la boca, no pudo retractarse de sus palabras.
Pensando rápidamente en una solución, pensó en darle a Janice algún tipo de compensación para compensarlo.
Mientras tanto, Harold estaba furioso cuando dijo: “¡Mientras yo esté vivo, no tienes derecho a hacer la llamada en esta casa! Este es el lugar de Janice. ¿A dónde le pides que vaya?
“Cálmate, papá”. Janice mantuvo la calma y le sirvió un vaso de agua. Casualmente, se burló: “Debe haber olvidado que corté mis lazos con los Procter hace mucho tiempo”.
Sus palabras sirvieron como control de la realidad para Kenneth mientras los recuerdos inundaban su cabeza.
Después de su intento de suicidio, los Procter querían llevársela, pero Janice insistió en quedarse. Entonces le pidieron que eligiera entre ellos y él, obligando a Janice a irse con ellos. Sin embargo, ella
Afirmó que Kenneth era su mundo y que no podía vivir sin él.
Eso fue lo que rompió el corazón de su familia. Su propio padre dijo que no tenía una hija como ella y que de ahora en adelante estaría sola.
Después de que se fueron, Janice lloró. Y aunque Kenneth estaba impaciente por irse, se ablandó ante su cara de llanto. “La residencia Miller es su hogar”, dijo.
Se lo había prometido a Janice y, sin embargo, la estaba echando ahora mismo.
Los Procter la habían abandonado y no había lugar para ella en la residencia Miller.
El mundo era bastante grande, pero aun así había perdido un hogar.
Sentimientos complicados se agitaron dentro de Kenneth. “I-”
“No te sientas culpable, Kenny. Nunca habrá paz mientras personas como nosotros permanezcamos bajo el mismo techo. I
Quería organizar un bonito banquete de cumpleaños para papá, pero nunca esperé que no se pudiera proteger la paz.
Incluso en un día como hoy. Si hay alguien que tiene que irse, desearía que fuera yo”. Jéssica
interrumpido.
Kenneth agarró la cintura de Jessica. “¿Por qué te vas si eres mi esposa?”
Luego se volvió para mirar a Harold. “Papá, he estado construyendo mi carrera durante tantos años y nunca he
se quejó una vez. Si este es mi castigo, estoy dispuesto a aceptarlo. Pero es innegable que Jessica es tu
nuera. Ya que todos están aquí, será mejor que les digamos quién es mi esposa”.
Harold lo miró furioso. “¡Como dije, no tienes derecho a hacer la llamada en esta casa!”
Darrell puso cara de inocente. “Abuelo, podemos entender que tengas fe en Ethan. pero el se ha ido
ahora. Ahora que no me reconoces como tu nieto, ¿quieres terminar el linaje conmigo?
