Capítulo 99
Matilda se quedó callada un rato y dijo preocupada, Gisela, conseguiste este papel con mucha dificultad, si algo sale mal…
–¡No te preocupes, si algo sale mal, puedo asumir la responsabilidad!
Matilda no dijo nada más, pero su mirada se volvió más fría.
A las tres de la tarde, Natalie llegó puntualmente al lugar que Tina había acordado con el chico.
Según las características que dijo Tina, Natalie reconoció rápidamente al hombre vestido con un traje gris plateado, sentado solo junto a la ventana.
Llevaba unas gafas de montura dorada, su rostro era atractivo y sonriente, en cuanto lo vio, Natalie tuvo una sensación de brisa primaveral.
Sonrió y se acercó lentamente a él, Natalie golpeó ligeramente la mesa: -¿Señor Abaroa?
Rafael Abaroa levantó la vista y vio un rostro de agresiva belleza.
Se quedó inmóvil un instante y luego sonrió: -¿Señorita Rojas?
Natalie asintió y se sentó frente a él.
-¿Desea beber algo?
-No, vine a disculparme personalmente con el señor Abaroa, no quiero tener una relación recientemente, esta cita fue arreglada por mi familia, espero señor Abaroa que pueda entender, solo dígale a su familia que no me gusta usted cuando regrese.
Rafael estaba callado y negó con la cabeza, -Lo siento, no lo entiendo.
Natalie se sorprendió, -señor Abaroa, creo que debería haber dicho algo muy sencillo de
entender.
Rafael se mostró cariñoso y miró a Natalie con calma, -Tú no eres Tina.
Natalie:
Al ver que ella no decía nada, Rafael dijo: -He visto la foto de Tina antes de venir aquí.
Rafael estaba callado y negó con la cabeza, -Lo siento, no lo entiendo.
Natalie se sorprendió, -señor Abaroa, creo que debería haber dicho algo muy sencillo de
entender.
Rafael se mostró cariñoso y miró a Natalie con calma, -Tú no eres Tina.
Natalie: -…
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Al ver que ella no decía nada, Rafael dijo: -He visto la foto de Tina antes de venir aquí.
Natalie frunció los labios y ajustó su humor, importante que no podía venir, por eso me pidió que viniera a verlo.
señor Abaroa, lo siento, Tina tenía algo
Rafael siguió sonriendo, -Lo siento es mejor dejar que la verdadera Tina me hable en persona, regresaré y le diré al intermediario que estoy interesado en Tina.
+15 BONUS
Emiliano no esperaba encontrarse con Natalie en la cena con sus colaboradores.
Frunció el ceño cuando vio a la persona sentada frente a Natalie.
Rafael acababa de volver desde el extranjero y no conocía a ninguno de los amigos de Natalie, así que no era lógico que conociera a Natalie.
De repente, Emiliano recordó que habían dicho que la familia Abaroa había concertado una cita para Rafael, ¿podría ser Natalie la mujer de esa cita?
Llamó inmediatamente a su secretaria, -Investiga la agenda de esta tarde de Rafael.
En el camino de vuelta, Natalie llamó a Tina.
-Tina, es posible que tengas que quedar con el chico de cita.
-¿Por qué?
–
-Él vió fotos tuyas antes de la cita, por eso me reconoció al principio.
ya
Tina:
–
Apretó los dientes, ¡debió ser su madre quien le enseñó la foto!
-Ya veo, vuelve y descansa bien, debiste pasar mucha vergüenza en ese momento.
-No estaba avergonzada, lo único en lo que podía pensar era ¿todavía tenemos un trato?
Tina se quedó paralizada un momento, y luego no pudo evitar reír, —¡No te preocupes, tenemos un trato hecho!
Bueno, te dejo para que sigas con tus asuntos.
Acababa de terminar su llamada con Tina y Natalie recibió una llamada de Leonardo.
-Natalie, ¿dónde estás ahora?
